Felices pascuas: la seguridad privada está en orden.
- Voz Gremial
- 15 abr 2022
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Así como en las pascuas de 1987 Raúl Alfonsín capitulaba frente a los militares carapintadas y demostraba el agotamiento de un proyecto político que presentaba a la democracia como factor suficiente para contener las demandas sociales y representó el principio del fin de la ilusión de que "con la democracia se come, se educa y se cura", hoy nos encontramos con un sector sindical que capitula frente a la patronal explotadora, curiosamente dirigida por algunos ex militares, ex policías y carapintadas, uno de ellos el mismísimo Aldo Rico con participación en la dirección de la empresa Chapelco SRL, prometiéndoles una paz social como la que el alfonsinismo prometió a los militares luego aquella fatídica semana santa.
Hace casi 10 años atrás, exactamente el 30 de septiembre del 2012, el diario Tiempo Argentino revelaba la trama encubierta de quienes estaban detrás del negocio de la seguridad privada en aquella época. Algunos aún continúan en la actividad, otros se fusionaron, otros entregaron sus legados a socios o familiares, algunos ya desaparecieron o directamente el proceso biológico hizo lo suyo. Además del líder carapintada, el diario descubrió los nombres de varios represores acusados de cometer delitos de lesa humanidad, policías retirados que se reciclaron en las agencias de vigiladores, en un intento por blanquear sus prontuarios, entre los que figuraban:
• Héctor Mario Schwab, miembro del grupo de tareas de Antonio Bussi en Tucumán dueño de Scanner SA.
• Ricardo Luis Von Kyaw, ex miembro del Destacamento de Inteligencia 101 de La Plata e integrante directivo de la ex Videco ahora parte del grupo Securitas.
• El ex capitán de fragata Adolfo Miguel “Palito” Donda Tigel, preso por 62 crímenes de lesa humanidad cuyo hijo Santiago Adolfo Donda, maneja Top Air Security quien tuviera como socio al ex comisario Salvador Ramón Patti, primo hermano del antiguo intendente de Escobar, Luis Patti.
• Víctor Rafael Listorti, antiguo paracaidista militar y empleado de Aldo Rico en Chapelco quien luego sería dueño de Mulis Seguridad Integral SA.
• Jorge Alberto Tito, carapintada dueño de Hunter Security quien tuvo de apoderado a Jorge Luis Toccalino
• Jorge D’Amico, quien fue socio de Vigía SRL.
• Ernesto Fernández Maguer, presidente de Segur Baires SA.
• Aldo Mario Álvarez, ex jefe de Inteligencia del V Cuerpo de Bahía Blanca y compañero de promoción de Ramón Camps dueño de la agencia Alsina SRL.
• El represor Rolando Oscar Nerone, apoderado de Organización Anselmi SRL y Escorpio Seguridad Integral.
• Ex comisario de la Federal Roberto Raglewski, vinculado a la empresa Murata SA, a través de su mujer, María Paula Stella, con fuertes vínculos en la Ciudad de Buenos Aires y acusada por los aportantes truchos para la campaña de Mauricio Macri.
• Roberto Salvador Ontivero, socio de las firmas Insem SRL y Chess Security and Safety.
• El ex carapintada y mayor del Ejército Jorge D’Amico, investigado por delitos de lesa humanidad socio a Vigía SRL.

Diez años después de este informe, las caras de los empresarios de seguridad se han aggiornado pero aún así persisten en algún sector de CAESI los mismos métodos y costumbres de antes. Los empresarios se han reciclado y ahora FATRASEP se presenta como la sucesión a la voluntad de Ángel García, histórico socio gremial de la Cámara Empresarial. Ante la arremetida patronal que viola sistemáticamente todas las leyes laborales y el convenio colectivo de trabajo, los sindicatos conglomerados en la nueva federación renunciaron públicamente a la lucha y negociaron con los verdugos de los trabajadores “jamas realizarles un paro”.

Los popes del sindicalismo empresarial, Gustavo Pedrocca, Julio Gutiérrez y sus órganos de difusión, ratifican su intención de querer mantener el triángulo Estado-CAESI-sindicatos: Una estructura hecha a la medida para garantizar la superexplotación y la dominación política e ideológica de los trabajadores. Ese es el verdadero significado de la paz social de la que hablan.

Sin embargo, ese triángulo otrora tan poderoso e inquebrantable de otras épocas no les garantiza el éxito de su empresa. Fundamentalmente, porque la organización de los trabajadores en gremios que no resignaron la lucha se viene extendiendo y fortaleciendo desde hace ya un tiempo, la pata sindical de la derecha que persigue, arma causas y mete presos a referentes de gremios que con presencia han ganado las calles y la resistencia de estás organizaciones ha demostrado la inutilidad de algunas estructuras sindicales a la hora de encorsetar y de frenar la lucha de los trabajadores en su papel de garante del disciplinamiento que tanto necesitan los sindicalistas y empresarios del Pro.
La paz social que necesitan es que los trabajadores acepten mansamente ver cómo los de arriba van por sus conquistas y reivindicaciones con el fin de aumentar o sostener la cuota de ganancia del capital. Pero ante más disciplinamiento, la respuesta debe ser más rebeldía.
Fuente: https://www.lacorrienteavanza.com.ar/web/index.php/noticias/6688-quienes-estan-detras-del-negocio-millonario-de-la-seguridad-privada
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